• Belén Arjona, Sangre en la nevera

    Los dos besos que me dio después de un concierto me emocionaron tanto como la Gibson Flying V que la acompañaba, y eso que yo soy más de Fender (salvando distancias con la maravillosa SG y su edición de dos mástiles que me pone palote).

    Pues eso, a esta artista la conocí en un concierto y me gustó. El rollito niña mala es algo que me puede, como en el caso de Pilar Rubio. Aunque todos veamos que no es la revolución del rock, que las letras son mejorables y si la conoces un poco descubres que sin colaboraciones tal vez no hubiese sido nada, me gusta, su voz, canciones y actitud, tal vez un poco punk.

    Visto en: Youtube. B. Arjona en la Wikipedia.

  • A mí Bill Gates me cae de puta madre

    Aunque ya se sabía, esta semana se ha comentado mucho la opción que ha tomado Bill Gates de retirarse. Me parece perfecto por su parte. Creo que todos le debemos mucho a este hombre. Hay quien opina que no, que fue (y es) un oportunista, que ni siquiera él programó lo que vendió como MS-DOS, que sólo quiere el dinero que encima todo lo que hace lo hace mal y se impone por un monopolio etc. Es cierto, tuvo una oportunidad de oro y la aprovechó, hizo creer al gigante IBM que tenía exactamente lo que buscaban cuando ni él, ni Ballmer ni Allen tenían absolutamente nada, sino un amigo de éstos que les vendió el juguete por bastante poco. Esta historia la conocemos todos, a mí me parece una jugada excelente.

    Sobre el dinero, he de decir que hasta el propio Steve Jobs popularizó «No somos una ONG, queremos ganar dinero», y es que esto de la informática es un gran negocio del que casi todos esperamos algo, ¡yo incluso hasta un trabajo!

    Sobre el trabajo de Bill a nivel mundial no puedo hacer otra cosa que quitarme el sombrero. Vendía un sistema operativo compatible con la mayoría de los ordenadores, como resultado, tanto los ordenadores como sus sistema se expandieron a toda velocidad, y con eso consiguió hacer llegar la informática a sitios insospechados como por ejemplo, mi casa en un IMB con el OS/2 y unos disquettes del DOS. Con una competencia inexistente (al menos en esta parte del Atlántico), después que si el 3.X, el 95.. Xp, los he tenido todos. Y eso gracias a un modelo de negocio espectacular del señor Gates. Sino fuese por él no hubiese descubierto otros sistemas, ¿cómo? Pues como todos, sus sistemas tienen fallos, necesita más máquina y uno tiene que buscarse la vida, en forma de pingüino en mi caso.
    Además imagino que como casi todos (y como casi todos los que le critican) empezamos en esto de los ceros y unos con sistemas y programas de Microsoft, y hasta nos gustaban. Aún recuerdo hacer mis primeras páginas en versiones desfasadas de eso llamado Frontpage.

    Microsoft no se limita a hacer sistemas o aplicaciones de oficina, sus juegos son muy buenos en general («distribuidos por», quiero decir), desde los Age of Empires o su creación estrella Halo, sin olvidarnos de los simuladores de vuelo. Gates se suele portal en este tema, aunque lo primero que nos venga a la cabeza al escuchar «juego» y «windows» sea «buscaminas».

    Una lástima que de sucesor esté Ballmer, yo, personalmente, echaré en falta a uno de los más famosos poseedores de acciones de Apple. Deliciosa ironía que atormenta a los maqueros, y eso me agrada.

    Visto en: Piratas de Sillicon Buhardilla Valley.

  • No estoy hecho para tener pareja, vaquero

    Estoy bien. Me encuentro bien. Estoy solo, pero bien. Y esto hace apenas unos meses me haría sentir hipócrita. Supongo que hasta los tíos como yo, niñatos con juguetes caros que juegan a ser cowboys, hasta nosotros maduramos.

    No se puede tener todo, tener esto claro es un comienzo vital, si así fuese los de Olympus darían más margen y no se acabaría su plazo de reembolso el día 13, que si sacan un Apple MacBook ultraportable (día 15) y me gasto los duros en la cámara, esos dos días habrían sido nefastos, pero los meses posteriores asesinos. Pensaba dedicar una entrada completa a esto, pero me pareció un temas bastante tonto, de esos que no generan ingresos en AdSense, así que os lo cuelo aquí.

    Ahora toca el momentazo Barrio Sésamo, cerca, lejos; arriba, abajo; estar bien, estar cojonudamente. ¿Notáis la diferencia? perfecto. La felicidad suprema es inalcanzable, gracias a Dios, de lo contrario la existencia humana sería aburridísima. Así que no me obcecaré en intentar estar perfecto, y para sentirme cojonudamente necesitaría, entre otras muchas cosas materiales (recordad mi pensamiento capitalista) a la chica de mis sueños.
    Como decía el señor gurú tiempo atrás, el día que logre engatusar a una bella modelo para… y continuaba haciendo cábalas sobre su magnífica vida futura de terciopelo rosa y sensores by Canon. Creo que me encuentro en ese punto. Sin complicaciones. Aunque he de decir que las modelos de pasarela no me atraen especialmente, lo que se conoce como belleza comercial no me parece bello. Últimamente pienso que amar no es lo mío. Y no me molesta lo más mínimo.
    Esto viene a cuento de que en ocasiones los dos mayores exponentes de la infame/ojetesfera me preguntan ¿me amas? Haciendo caso omiso de la homosexualidad intrínseca en la pregunta, creo que no. No amo. Quiero.

    Forma parte de mi concepción egoísta y despiadada del mundo, que tal y como están las cosas, no me veo capaz de alterarme, preocuparme, tranquilizarme, pensar un regalo, correr a un centro comercial, gastarme una pasta en un peluche, salir corriendo, cruzar más de media Pucela y presentarme con una carta escrita aprisa (pues la noche se echaba encima) en el portal de la amada, utilizar un número de teléfono diferente al habitual y al final, reconquistar. No. Aunque sea una de las cosas más románticas que he vivido en mi vida (como tercera persona), no. Eso sería fantástico, pero yo me conformo con un mediocre bien.

    Mi experiencia me dice que tener pareja formal da muchos problemas, gastas más, quebraderos de cabeza continuos: le gusta, no le gusta, por qué no dice nada, por qué se ha enfadado, etc. Y aunque se terminen solucionando y muchas veces estos enfados no tengan importancia. No me considero dispuesto a ofrecer tanto ahora mismo. He tirado por la borda casi todo mi romanticismo, pero me siento, irónicamente, bien. Sin riesgo no suele haber gloria, me arriesgaré a encontrarla sin arriesgar. Soy un cobarde con suerte.

    Sin prisas, algún día deberé que decirle a alguien que tendré que ponerme de rosillas, rogarte que no me abandones, aunque no eres ninguna maravilla me lo juego todo al dos de corazones.

    Visto en: See you, space cowboy!