Tan rápido y sencillo que nunca os he obligado a registraros para comentar, con dar un nombre y un mail tan falsos como la belleza de Robert Pattinson (y su notable cara de yonki) aquà maldice, insulta o canta cualquiera. Vamos que manda cojones tardar más de dos años en darse cuenta de que OpenID es un puto estorbo. TodavÃa suena peor congraturlarse por ello. Fueron los primeros, ¿véis como fueron los primeros? Lo véis, ¿verdad?
Cuanto más grande es el blog más fuerte se oye mi risa de mamonazo. Qué campeones. Imaginadme como Margaret Hamilton soltando los monos voladores desde mi buhardilla, ¡volad, volad!
Visto en: Y ahora a suprimir el blog de golf.
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