Se puede decir que este post es una continuación de la entrada en la que divagaba sobre mi idea de la religión y mi comportamiento hacia ella.
Quiero hablar sobre el fenómeno contrario, sobre los cientÃficos que reniegan cualquier cosa que no pueda ser demostrada pero respetan teorÃas cientÃficas que tampoco son demostrables a capa y espada. Lo voy a llamar la hipocresÃa del doctorado. Pero no quiero que se entienda como algo despectivo (al menos no a primera vista), si no como un comportamiento que no comprendo.
Me explico, la fe que veo es la misma que la de un devoto religioso, de cualquier religión. No se puede verificar, pero se sigue y se da por válida. En lugar de haber sido propuesta por Mateos o Lucas es posible que las teorÃas las exprese el robot conectado a una silla de ruedas de un personaje secundario recurrente de Los Simpson con un parecido muy conseguido al Superman más cinematográfico.
Supongo que ya sabréis por dónde quiero ir, y pido perdón mi ignorancia en el campo de la fÃsica avanzada, pero es que esa conducta me parece una sincera gilipollez y como dije al principio, hipócrita. No entiendo cómo pueden verse en el derecho de ridiculizar de forma brutal las creencias personales de alguien, sea en el Flying Spaghetti Monster, Yahvé o el BigFoot. Es vergonzoso. En el post de la religión dejaba claro que las teorÃas de la creación del universo me parecÃan muy pilladas por los pelos. Pero cientÃficamente se aceptan, y en algunos ámbitos parece que se imponen, pues no creer en ellas te harÃa sentir un ignorante retrasado mental que va contra el progreso del sistema.
Y esta es la corta (como las ganancias del AdSense) reflexión de hoy.
Visto en: Entiéndase también como continuación de los comentarios de este otro post de Evilution.
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