El término «experiencia» y escribir para gente mayor que yo

Hoy he tenido el examen de conducir, después de 10 meses y 350€, la he pifiado al final, pero lejos de cabrearme (más por la pasta que por fallar sabiendo que podría haber aprobado) me alegro de que ésta vez no me han tocado las narices. No me quedo con esa sensación de tomadura de pelo de la anterior ya que son exámenes donde debes acatar el resultado independientemente de lo que te parezca porque no puedes pedir una revisión ni una segunda opinión. El propio examinador me dijo que no se trata de falta de experiencia, sino que eso, en la vida real vale, pero en un examen no se debe hacer, así que he cascado. A esperar unas semanas, unos cientos de euros más y, bueno, a ver si ya…

De todas formas, lo que quería contar no iba por ahí, no en su mayor parte, si no que ésto me ha conseguido decidir a escribir una entrada que tenía en la recámara desde hace un mes, en realidad son dos entradas, pero con toda la movida de la Keynote y el MacBookPro que presentan mientras escribo esto no quiero dejar a Apple sin ancho de banda y publicaré una sola, así pueden disfrutar ellos también de sus minutos de gloria, parece que los de Intel y nVidia han reinventado la tarjeta gráfica integrada para grandes prestaciones.

La historia es que creo, firmemente además, que el término «experiencia» (para roleros: Exp.) se usa de forma muy arbitraria. Me fastidia que se quiera dar a entender que la experiencia es el tiempo que llevas haciendo algo, y no lo aprendido haciendo ese algo.

Un ejemplo, facilito, que salimos del puente del Pilar: 3 chicos van al FIB, uno, de 30 años es la primera vez que va, el segundo ha ido tres veces y tiene 25 años pero siempre ha estado en hoteles y nunca ha acampado. Y el tercero tiene 23, ha ido dos veces, una de ellas ha acampado y la otra no. El año en que van todos juntos deciden acampar, el primero, el mayor de todos, no tiene nada de experiencia sobre el FIB ni sobre acampar en el FIB, el segundo es el que más tiempo ha estado en el FIB pero no sabe nada sobre acampar en él, en cambio el último ya conoce los entresijos del servicio de camping, los lavabos, las duchas etc.
Como se observa el que más  experiencia tiene no es el que más tiempo ha estado, sino el que alguna vez lo ha hecho antes.

Ahora te pones a buscar trabajo, cosa chunga con la economía como está, y ves que recién titulado te piden una experiencia mínima de 2 años en el curre que sea. Lo que se traduce injustificadamente en un par de añitos que has podido estar en el negocio de un conocido haciendo lo mínimo sin ganar nada de experiencia. En cambio en seis meses en otra empresa habrías aprendido a manejarte mejor, pese a que te siguen pidiendo años (demostrables) nada de experiencia real aunque te hayas enfrentado a supuestos prácticos como los que plantean para ese empleo. Demencial, ¿no?
Es lo que me comentaba el examinador al explicarme que sí, que era una putada no aprobarme por haber intentado colarme con disimulo al rodear un coche en segunda fila (¡aprendan a aparcar, hostias!) pero que aún así necesitaba más clases para examinarme de nuevo. Y luego, estar un año con la L de lerdo a la espalda para, erróneamente, ganar experiencia.
Se entiende aún mejor con los juegos de rol que comentaba al comienzo: un personaje que termina la aventura pero no ha hecho nada en el grupo ni se ha enfrentado a ningún problema del juego no habrá ganado Experiencia pese haber estado el mismo tiempo que el resto de personajes (o jugadores), en cambio, otro PJ que se haya decidido a intentar matar el dragón con ayuda de dos o tres amigos y luego dejar la partida, ha conseguido (si lo mata, claro) muchos más puntos de Experiencia. Por lo que el uso del término experiencia es incorrecto en la mayoría de los casos, pero es que tampoco hay una forma de medir los conocimientos a no ser que sea un examen. Así que habrá que buscar algo.

Ahora viene la segunda parte de la entrada, muchos, la mayoría de vosotros, sois mayores que yo. El espectro del público del blog es el siguiente: chica, entre 18-23 años, muy guapa, mi número de teléfono es el 6… Perdón, me equivoqué. Más bien creo que la edad se alarga algo más, que la mayor parte de vosotros tenéis entre 18-28, mientras que yo acabo de cumplir los 20.

Así que pensé, ¿qué hago yo, que soy de los pequeños, escribiendo para gente con más experiencia? A veces al escribir algo recibía respuestas del tipo: eso se te pasa con la edad, yo también tuve una sensación parecida cuando… Yo decía: normal, comparado con muchos soy un auténtico criajo. Y luego me dí cuenta. No tiene por qué ser así, acabo de explicar que la experiencia no viene designada por cuántos años tienes sino cuánto has vivido.  Entonces, me reconforta bastante que no me tratéis como un niñato, o al menos, no a la cara. Lo cual entiendo que quiere decir que lo que he ganado en Exp. Points. sirve para «ilustrar» a alguno de vosotros, aunque sea con gilipolleces. Y eso me agrada bastante, no lo voy a negar, me agrada recibir clicks a la publi y sentirme útil. Ah, y el nuevo MacBook Pro también, parece un pepinaco por lo que comenta Jason Chen.

Visto en: Gizmodo, la presentación.