Para los viajeros
- Fijarse en las paradas de un autobús en el indicador correspondiente de forma que nunca sea necesario estar esperando y cuando el vehÃculo realiza la parada abordar al conductor con la pregunta «¿Este va a El Corte Inglés?» Por que en ese papel ya dice «Calle Callosa Número Numeroso (Frente C.C. El Corte Inglés)».
- Para facilitar el acceso al autobús serÃa conveniente tener preparado el importe del viaje (1.10 en esta ciudad, una puta barbaridad) o la tarjeta de bonobús sea del tipo que sea (en mi caso 35 céntimos, una puta barbarie). Se agilizarán las colas y será más fácil cazar a los que se hacen los remolones buscando las monedas en los bolsillos para concluir que no tienen un duro, pero ya han llegado a la próxima parada.
- Si tu amigo está al fondo y tú acabas de entrar pero hay demasiada gente de por medio y te es imposible atravesarlo sin molestar, no le grites.
- En caso de llevar un carrito de niño recuerda siempre poner el freno del aparato y estacionarlo en la zona reservada para ese fin. SÃ, existe, y estorbará mucho menos que en el pasillo.
- Sobre todo para jubilados, no insistáis en decir que ahora os bajáis y dejáis paso al asiento libre (y al que dejáis vacÃo) cuando todavÃa quedan tres paradas para vuestro destino. No hay que mentir, señores, que encima el viaje os sale gratis.
Para los conductores
- Desayunar, almorzar, comer, merendar y cenar bien. Los bordillos no alimentan.
- Si el autobús va lleno (por ejemplo en las horas punta) pero en un tramo apenas hay tráfico, olvidad pisar a fondo el acelerador, el próximo semáforo puede estar en rojo y, querido amigo, los demás no llevamos cinturón de seguridad (muy posiblemente ni vayamos sentados) de manera que la frenada puede ser caótica ahà dentro.
- Un semáforo situado a 50m que está rojo es probable que lo siga estando a 40m. Frena utilizando el freno motor (ver punto 2) y no te lo saltes.
- Todos tenemos dÃas malos pero tu trabajo no deja de ser de cara al público y un «Buenas» cuando entra uno o varios pasajeros siempre está bien.
- Por puro compañerismo con el resto de conductores (que nos chupamos vuestros «Gracias por ceder la prioridad») se agradece que utilicéis mejor los intermitentes, no nos conocemos el recorrido de cada lÃnea y mucho menos nos sentimos seguros cuando no sabemos qué va a hacer un bicharraco de 20 toneladas que se cruza sin avisar a pocos centÃmetros de nuestro vehÃculo.
Y todos serÃamos más felices.
Visto en: Valladolid.
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