Autor: ElGekoNegro

  • Soy un tipo con suerte

    Así a quemarropa, me considero un chaval con mucha suerte. No por el clásico «Gracias Señor por haberme traído al (casi) primer mundo y no tener que trabajar como tantos otros niños», que también, sino que en los golpes de la vida que terminaron disputándose al azar, me ha ido saliendo cara.
    No voy a concretar ejemplos pero aseguro que cuando algo parecía ir mal rebotaba en una cama elástica imaginaria y de nuevo todo arriba. Al menos ese es el regusto que me deja. A potra, a dulce y victoriosa suerte.

    As de picas, Reina de Corazones

    No sé si es sólo que lo veo así y que cuando algo me ha salido mal no lo tengo tan en cuenta, por ejemplo mi desastrosa vida sentimental, pero me hace creer que soy un chico con más suerte de lo normal. Sin llevar amuletos ni objetos a los que otorgue un poder casi místico, especial. Nada. Por eso esto tiene un problema, en el momento en que los malos resultados y reveses inesperados del hilo de la life me dejen K.O. más a menudo que las alegrías y la fortuna no tendré a qué achacárselo y entraré en una conducta autodestructiva con una jeringuilla clavada en lo que Pablo Motos llama codo, una espiral de dolor, un tornillo sin fin de desgracias. Y al final, por puro azar y sin haber un motivo aparente, la ruleta de la suerte girará hasta regalarme una salida satisfactoria. Y vuelta a empezar.

    Mientras tanto, seguiré confiando en ese bonus que me lleva ofreciendo la vida desde que tengo consciencia.

    Visto en: Oh, what a lucky man he was.

  • Burrito

    Puede parecer que este no sea el sitio lógico para decir lo siguiente, pero no, al contrario, lo es. Tengo síndrome de absitencia de ese plato formado por una torta, queso, trozos de pechuga de pollo y verduras que se come enrollado. Creo que va para un mes, tal vez más. Quiero comer un puto burrito.

    Y repito, este es el sitio perfecto para publicar estas cosas, joder, ¡es parte de su encanto!

    Visto en: Tex-Mex.

  • Verano, No me gusta/Me gusta

    No me gusta

    • El calor
    • La falta de planes
    • El calor

    Me gustan

    • Las minifaldas, me quedan fenomenal

    Visto en: ¡31º en mayo!

  • Pizarras con reconocimiento de caracteres

    Una de las cosas que más me hizo flipar de la autoescuela donde iba era que tenían una pizarra blanca en la que proyectaban las imágenes del programa de tráfico y en la que se podía interactuar con rotuladores como si fuese el ratón, podías señalar las maniobras erróneas, cruzar flechas, etc, aparecían a la vez tanto en el monitor como en la pizarra. Todo un avance, una pizarra con Paint.

    Yo quiero ir un poco más allá y es que no entiendo cómo es posible que las pizarras no sean paneles de ese tipo que reconozcan caracteres, simplemente un software OCR. Palm tiene un sistema igual desde hace más de una década y Microsoft empieza a soltar los primeros Surface que podrían funcionar así. Imaginad eso mismo pero extrapolado a un monitor táctil de mucho más tamaño, todo lo que ocupa la pizarra.
    Y tiene mercado, infinidad de ventajas: para empezar, erradicaríamos el complejo masculino de la letra de niña. Todos escribimos igual, la misma tipografía para todos (esto ya se vio en Futurama). Por otro lado nos olvidamos de posturas incómodas cuando hemos de escribir a baja altura o demasiado arriba, escribimos donde queremos y luego colocamos el texto en la línea que prefiramos. Por extensión, adiós a escribir torcido. Todo un logro. Además, no deja de ser una pizarra, en el momento en que se quiera pintorrojear cualquier garabato encima seguirá siendo posible.

    Seguro que algún ingeniero del PARC tiene una en su despacho y no la quiere compartir con el populacho.

    Visto en: ¿Alguien se anima a montar una?

  • Hacer un poquito cada día

    Creo que esto es algo que a todos nos han dicho a menudo, «Si hicieses un poquito cada día al final no te quedabas hasta las mil y llevabas todo mejor». Frases de madre, hay millares.

    Prometo que lo intentado cual niño bueno, pero no me sale. Y no sólo eso, no tiene sentido. No tiene sentido hacer media hora de cada asignatura porque para cuando me quiero poner en serio ya se ha pasado ese tiempo. Prefiero estar días sin hacer nada, o lo mínimo, y cuando queda poco tiempo estarme 15 horas del tirón, descansar un poco, despistarme con cualquier chorrada y luego volver a la carga. Mucho más cómodo que dedicarle pequeños espacios de tiempo de manera contínua. A mí me funciona desde la denostada ESO. El teórico de coche me lo aprendí la noche previa al propio examen, quedaban horas.

    Creo sinceramente que no es una opción de vagos despreocupados ni de falta de organización, sólo diferente. Si cuando eras niño te daban dos meses para leer un libro y el libro tenía 10 capítulos olvídate de leer un capítulo al día porque cuando quieras hacer el examen pertinente los detalles apenas te sonarán y parecerá que no te lo sabes. Coño, mejor calcula cuánto puedes tardar en leer un libro así y lo restas del tiempo total para saber cuándo comenzarlo.

    Te va a pillar el toro

    Jamás en la vida me ha pasado eso de llegar el día de entrega de un trabajo, práctica o examen de algo y no tenerlo completo o estudiado. Subjetiva y personalmente el sistema me funciona. Dormiré más o dormiré menos, pero si es para el día 15 yo el 15 lo tengo impreso sobre tu mesa o como me pidas que lo entregue, aunque me toque esperar en la puerta de la papelería para que abran. Me las arreglaré para tenerlo.

    En cambio ahora mismo estoy jodido, no por falta de tiempo, sino porque mañana tengo que entregar una hoja de planificación donde debería haber apuntado qué he ido haciendo de una práctica cada día. Esa práctica la comencé el sábado. Me veo obligado a mentir y rellenarlo con tonterías por no poner que realmente la he hecho casi del tirón y me duele que en ese aspecto, realmente por falta de previsión, me va a pillar el toro. Pero el programilla funcionará, que es lo importante. Y la hoja mencionada, que no es más que un sistema neofascista stalinista de control del proletariado que culminará en la Tercera Guerra Mundial (todos sabemos que esa guerra está en fase alfa), no tiene sentido, pondré uno de mis maravillosos ejemplos coronados por una aureola dorada para que lo captéis: Si tenemos una planta de fabricación de automóviles a la que queremos sacar un partido tal que facture 100 coches al mes nos da igual si va haciendo pieza a pieza cada coche y no los termina hasta fin de mes, va haciendo coches de uno en uno hasta sumar 100 al final del mes o está parada durante medio mes y luego, en lugar de trabajarse 8 horas al día en ella se trabajan 18 horas o las que hagan falta para rellenar el cupo. Sea como sea el día 30 tendremos 100 coches.

    Bueno, pues que me dejen trabajar a mi aire que yo para dentro de unas horas lo acabo, aunque me toque ir de empalmada, pero que no juzguen mi sistema de caos organizado si el resultado es el mismo. La única diferencia es que frente a imprevistos y errores no controlados ni esperados tienes mucho menos tiempo de reacción. Pero sin riesgo el premio sabe a poco.

    Visto en: El insomnio no es malo. La ojera es bella.