No recuerdo en qué programa concreto de Gentilicios que viven en alguna parte del mundo sacaron Dinamarca, Copenhague para ser exactos, y me quedé maravillado. Por sueldos, por la ciudad, por sueldos, por la tranquilidad, por sueldos, por subvenciones, por sueldos, por ayudas, por sueldos, por precios, por civismo. TransmitÃa esa sensación de… de, joder, aquello era Europa. En mayúsculas. España está guay, fiesta, bares, cañas, calorcito, tal… ¿Y qué? Dime, ¿qué? «Como en España en ningún sitio». Eso es que no has salido de aquÃ, asà de claro, no conoces una mierda del mundo.
Como sabéis, siempre he tenido en mis planes emigrar. SÃ, a ratos no me encuentro cómodo en mi madre patria (cada vez más a menudo) y a la mÃnima ocasión que tenga cojo un vuelo dirección Una Vida Mejor. Hasta hoy barajaba Irlanda y California (este segundo destino cobra fuerza gracias a un profesor y una empresa que todos conocéis pero que no sé cómo saldrá asà que no diré nada porque si sale mal os reiréis de mà y no me hace gracia y tranquilos que ahora pongo una coma y respiráis,) pero este pequeño paÃs ,si nos ceñimos a la penÃnsula de Jutlandia, me comenzó a llamar poderosamente la atención después de ese programa televisivo. Mucho. No es para menos, se proclama como el paÃs más feliz del mundo. Y no me extraña, según sacaron los del programa, un chaval de 15 años trabajaba repartiendo publicidad en bicicleta, una semana al mes, cotizando para la seguridad social y por 150€ al mes. Yo, siendo mayor de edad, he estado de becario para una universidad con seguro (cuyo coste me lo quitaban del sueldo) para ahorrarse la seguridad social, sin contrato, 5 dias a la semana, 4 horas al dÃa, 300€. No me sale rentable.
Tirando de archivo he encontrado pocas entradas relacionadas con el mencionado reino, apenas una sobre su conexión a internet, pone los pelos de punta y los dientes largos.
Hasta aquél momento no sabÃa casi nada de Dinamarca ni de Copenhague, habÃa visto a la sirenita un millón de veces, me sonaba que habÃa algo del medio ambiente próximamente y sabÃa que era un paÃs civilizado de los de verdad, de los de ir en bici y dejarla en la puerta de la pastelerÃa mientras compras sin miedo a que un latin king se la lleve, ¿por qué? Porque allà no hay. Seguro que tampoco canis. ¿Y eso? Allà la gente estudia. De gratis.
Si básicamente es como España pero sin gilipollas, es decir, sin 35 millones de «personas», una monarquÃa en una penÃnsula (con excepciones tanto allà como aquÃ). Los tocapelotas dicen que es una mala idea porque de vez en cuando matan unas focas, el idioma es muy difÃcil (no sé pronunciar el tÃtulo de la entrada), el clima es más frÃo y no hay «tanta fiesta». Permitidme, pero el número de cetáceos no es algo que me quite el sueño, me da pena, pero lo veo como un mal menor, la gente allà (por lo que dijeron) hablan bastante bien inglés y todos sabemos que es más fácil comunicarnos en inglés con alguien que no es inglés que con uno cuya lengua materna es el idioma de Lord Byron (ni que sólo tuvieran a Shakespeare de poeta) y creo que podrÃa aprender a manejarme en danés si hiciera falta, si vivimos en AndalucÃa o en Canarias podemos encontrar unas temperaturas más bajas pero no creo que varÃe mucho con respecto a la Meseta Norte y la zona cantábrica, finalmente, me gusta salir un sábado y tomarme tres cervezas en casa de un amigo y luego dar una vuelta, creo que eso lo puedo extrapolar allÃ.
Otro tema manido es el «es que allà todo es más caro». Pues sÃ. Pero también «pues no». Por ejemplo, el cambio dólar-euro, si cualquier cosa de 100$ la venden a 100€ ese es el precio aquà y en toda la zona euro, casi seguro. Con las coronas danesas pasará lo mismo. Por supuesto que a lo mejor el pan es más caro, pero se compensa con lo que pagan a la gente por trabajar y dejarlos vivir.
No lo tiene todo, pero tiene una lista de cosas que no me ofrecÃan antes. Me convence. Voy corriendo, nunca me enseñaron a andar.
Visto en: København.