Suena el móvil, llegan tarde, me aconsejan que los espere en una cafeterÃa cercana, comienza una leve y gratificante llovizna, entro en la cafeterÃa. Apenas consigo adentrarme un par de metros cuando una chica se tropieza conmigo, joven, estatura media y castaña. Derrama su cappuccino encima mÃo. Se lamenta, pero la tranquilizo con un sincero «no pasa nada, está bien». SonrÃe. Comenzamos a hablar, recuerdo que tengo tiempo, propongo salir pasear bajo la lluvia. Accede. Salimos con la intención de caminar, coge mi brazo. Ella tampoco habÃa sido previsora y no llevaba paraguas, la lluvia era cada vez más fuerte. Corremos a un soportal para protegernos. Nos miramos. Cada uno de nosotros descubre que la otra persona era a quien habÃamos estado esperando toda nuestra existencia.
Visto en: Lo he soñado hoy.