Autor: ElGekoNegro

  • 700

    Habrá que desenvainar las espadas del texto, y escribir un post aunque no haya algún pretexto. Y dedicárselo al primero que pase comentando, al que se quedó pensando, al que no quiere pensar (♪).

    Así es, esta es la entrada número 700. Una cifra que no dice mucho pero me sirve como excusa para hablar del blog en el blog (como si necesitase alguna). Se avecinan malos tiempos para esta buhardilla, no os extrañéis si sólo empiezan a publicarse Píxeles del jueves tirando de archivo, frases o citas, alguna canción y lo peor de todo: post patrocinados, que cada vez aflojan más pasta.

    El plan (para al menos los tres próximos meses) es pasar las mañanas en clase, comer en casa -los días que pueda- y hacer como que trabajo en proyectos importantes por las tardes para salir de la oficina (sí, ¡oficina!) a las ocho y diez de la tarde, por lo que llego a casa a las ocho y media o nueve menos cuarto, todo al gusto de Auvasa. Ese será el preciso momento cuando empezaré a dedicarme a mis prácticas, estudiar y mirar cómo hacer algo del curro, lo siento, funciono así. Y con todo esto ya le estoy quitando un par de horas diarias al sueño.

    Quiero decir, de las 350 entradas diarias de media que solicitan de forma tentadora mi atención y los post donde directamente os insisto en que me hagáis rico pasaré a leer muy por encima, comentar alguna vez y publicar al ritmo del Palero.

    Gracias por haber soportado 699 más.

    Visto en: Un lagarto abuhardillado.

  • Díme cómo te llamas… (III)

    Los más ancianos del lugar sin duda recordarán que en dos ocasiones propuse un juego. Para los más novatos, las reglas son sencillas, no se vuelve a publicar nada por aquí hasta que no se resuelvan los nombres de los personajes. Con esto consigo ganar tiempo para estudiar y que el blog se mantenga por sí solo (en caso de que la idea funcione), vamos, que como soy un vago redomado me limito a que vosotros generéis tráfico y gastéis ancho de banda para tocarme mientras ojeo las estadísticas sin fundir neuronas. Intenté ponerlo difícil pero me salió el tiro por la culata así que no sé si esta (como la anterior) estará resuelta en minutos o necesitéis más tiempo para dar con sus identidades.

    Visto en: Flickr.

  • Led Zeppelin, The Rain Song

    Cuando los rockeros desenfundan los zippos… Puedes ser duro, puedes ser insensible, puedes hacernos creer que nada te perturba, que eres inmune a todo lo que te rodea… Pero si escuchar esta preciosidad no te enternece deberías pensar seriamente en lanzarte al Pisuerga y meditar en lo humano que pudiste haber sido, cabrón.

    Visto en: Youtube, The Song Remains the Same y por supuesto, Houses of the Holy.

  • Con licencia para putear(me)

    Tengo dos noticias, una buena y otra buena ¿por cuál comienzo?

    Perfecto, la primera es que por fin ha llegado mi querida Lowepro CompuDayPack y que «sólo» me ha costado 45€ de aduana, en lugar de los 60 que me dijeron en la primera llamada y los 67 que me afirmaron ayer por teléfono, sabe Dios por qué este cambio de precio, yo ni lo cuestiono, sólo me quedo maravillado con su color LeafGreen y lo bien que cabe y se ajusta cada ítem en su cubículo.

    La segunda es que vuelvo a ser un currito. Sí, de penalti, yo no lo buscaba, de verdad. Supongo que hay una serie de elecciones que separan a los niños de los niños con rizos, una de ellas es subirse al vagón adecuado cuando el tren se para en su andén durante unos segundos. Ah, que todavía no he dicho de qué, pues «de lo mío».

    En mi universidad hay un departamento donde te apuntas y, con suerte, te encuentran un pequeño trabajo de becario -por eso lo de putear– en un horario que te venga bien. Mi caso es algo diferente ya que yo no eché ninguna solicitud, fue una profesora (Desarrollo y diseño web) la que me recomendó para una plaza sin comentarme nada antes, la empresa forma parte de la propia universidad (como que su oficina está en el mismo edificio), así que me quería meter de enchufado.

    Dijeron que vale y el departamento se tomó la molestia de hacerme perder media hora de clase para explicarme (por primera vez) lo que conspiraban acerca de mi futuro inmediato. Y, como suele pasar en estos casos, necesitaban que les diese una respuesta en el momento (ayer). Cuatro horas al día, 360€ al mes, sin necesidad de carnet ni experiencia previa, en el mismo centro… Por probar, sí quiero.

    Como consecuencia me comentaron que ya tenían programada una entrevista con «Ricardo», que supuse sería el jefecillo de todo el tinglado donde insistían en querer meterme.

    La entrevista ha ido bastante bien, si no fuese porque requiere que me ponga las pilas y aprenda bastantes cosas de las que debería aprender en segundo o tercero según el plan de la carrera, lo que dicho de otra forma, me mantendrá empollando el fin de semana para quedar bien el lunes (lo cierto es que no sé si empiezo el lunes o qué), pero becario como programador de PHP se me antoja un oficio difícil.

    Visto en: ESI Valladolid.