Hoy toca tema conocido:
Visto en: Youtube.
Ayer por la tarde quedé con un amigo para ver una pelÃcula, 21 Blackjack. Me gustó bastante y la recomiendo aunque sea solamente por la presencia de Kate Bosworth, no entiendo el por qué, pero últimamente me ha dado por las rubias.
Bueno, el caso es que pensábamos que el precio de las entradas se mantenÃa, 4 euros con algo, siempre nos hacÃan descuento por ser estudiantes, creo que es algo que hay en todas las comunidades autónomas. Asà que nos presentamos y cogimos las entradas sorprendidos: dos entradas por 10,80€ ¿Pero esto qué es? Pues lo que parece, que una entrada con descuento de estudiante sale casi por cinco euros y medio. Una auténtica pasada, asà que más valÃa que nos gustase el film. Creo que el hecho de que saliese Kevin Spacey era una garantÃa.
No contento con este varapalo, mi amigo decidió comprarse una cocacola en la tienda del propio cine, no nos habÃa dado tiempo de ir con las provisiones de fuera, asà que al volver me confiesa tristemente: «tÃo, tres cuarenta la puta cocacola mediana, más que una consumición en algunos sitios, ¡y está aguada!»
Con semejante percal pesábamos que serÃamos los únicos pardillos en la sala, ya que por sentido común el resto se habrÃa acojonado con el precio y hubiese preferido no ver ninguna pelÃcula, menos aún sin descuento, que eran 6€ por persona. Ciertamente, no hay mucha diferencia con respecto al precio joven-estudiante, pero al final de la noche se nota.
La sorpresa fue mayúcula, pues aunque tenÃamos asientos numerados no querÃa decir que todo estuviese completo. Pero lo estaba, la sala se llenó. Asà que no consigo entender que se diga que la gente no va (vamos) al cine, que encima de aceptar el atraco, tragamos como borregos. No asà como con el subvencionado cine español, donde da igual hacer caja o no, ya tienen unos impuestos que lo pagan. En cambio, alguien tendrá que costear los sexys modelitos de las jóvenes y rubias actrices extranjeras.
Visto en: Cinebox Vallsur.
Los dos últimos episodios resultan clave en la serie Cowboy Bebop, resuelven gran parte de la trama personal de Spike, el indiscutible héroe de la historia doblado por Pera (Woody Allen), donde se descubre bastante del pasado del personaje, guerras en las que participó y la chica que amaba, estos episodios son The Real Folk Blues (parte I y II).
A menudo me identifico bastante con este hombre de pelo verde, aficionado a los billares, el tabaco y el whisky. Yo prefiero la cerveza y no fumo, pero no rompamos la magia. Supongo que todo hombre se ve reflejado en algún personaje de ficción alguna vez. Junto con John Blacksad, mi alter-ego favorito es Mr. Spiegel.
Solitarios, tristes, ingeniosos y se creen autosuficientes, ¡ese soy yo! Lo duro es ver que me he peleado muchas veces pero nunca he luchado por nada. Siempre he confiado en mi suerte y me ha acompañado. Ayuda que haya decidido olvidar la mayorÃa de los golpes donde no estaba. Pero por una cosa o por otra, siempre he conseguido salir adelante, no hundirme y espabilar lo justo como para mantenerme a flote, sin resaltar, siendo consciente de dónde estaba y de cómo habÃa llegado hasta ahÃ, o de por qué no estaba donde querÃa estar.
Ya lo he comentado varias veces por aquÃ, pero no por ello deja de seguir siendo cierto, ando tan ocupado que no me entero ni de lo que hago. Ni de lo que quiero. Hasta esta semana. Me estaba comiendo la cabeza por una dama, ¿qué cosas? ¿verdad? Y, efectivamente, es un tostón. Un coñazo y una gran fuente de aburrimiento. Pero las ideas se desvanecÃan en minutos cuando volvÃa a echar una leve mirada al reloj: anda, corre, subnormal, que pierdes el bus. Si ni siquiera tienes tiempo para ti, ya me contarás cómo compartirlo con alguien, ¡gilipollas!. Mis conversaciones cerebrales son de este estilo, no os extrañéis, seguro que las vuestras son semejantes, a lo mejor no os insultan, pero son del palo.
De esto que hice algo que siempre se me ha dado mal: pensar frÃamente, y conseguir darme cuenta de que ¿hay algo mejor en lo que pensar que no sea en una chica? Quiero decir, vas por la calle, con tus cascos, camino Dios sabe dónde -yo no se lo he preguntado-, a tu maldita bola y vas pensando, ¿qué habrá para cenar?, ¿llegaba hoy el paquete de Amazon?, ¿para cuándo era lo de C? Uf, qué mal rollo… C… me queda tinta en el boli, ¿no? sabÃa que tenÃa que haber cogido uno de casa… etc. Bueno, antes yo iba asÃ, dudando de banalidades o temas totalmente triviales si lo comparamos con otros contextos. Ahora, Dios sabe por qué – o a lo mejor no- me dedico a pensar. ¿Se acordará?, ¿qué estará haciendo?, no, seguro que eso no -sonrisa-… Y vuelven mis discusiones neuronales, como un angelito y un diablo que merodean y pasean en cÃrculos por mis hombros: Dile algo, de perder, no pierdes nada. Dice el del tridente. Déjalo, está lejos, se buscará su vida y tú sólo podrás joderlo más. Replica la sensatez disfrazada de ángel.
Y asà hasta llegar a clase, la oficina, o el Borland.
La mención al Real Folk Blues venÃa a cuento de esto, ¿Sabes cuántas Julias hay en el universo, Spike? Es una de las frases que utiliza Jet para intentar retenerlo en lo que serÃa una búsqueda sin sentido -aparentemente-. La idea del vaquero que monta a Swordfish II es clara, no importa cuántas Julias haya en el universo, ni si quiera importa que la que vaya a buscar sea su Julia. Pero si lo era, él estuvo ahà y no habrÃa hecho nada. TenÃa que arriesgarse.
TenÃa que luchar, porque lo único que podÃa perder era tener todo por ganar. Aunque para ello tuviese que ser más capullo por un tiempo. Creo que lo tengo decidido.
Visto en: Cada dÃa estoy más seguro, el mejor anime jamás creado.
Visto en: Flickr.
No se me ocurre una mejor para hace un publireportaje, o post patrocinado, que a las cuatro menos ocho minutos (hora del sistema) de la madrugada. Pero asà soy yo, y la cafeÃna es mi amiga, ahora más que nunca, muñeca.
El análisis de esta noche va sobre un cómputo de los que nos gustan a los tÃos, cine y coches de lujo, o superhéroes y coches, o cómic y coches… Bueno, ¿todos conocéis al Adi R8? ¿No? Vuestra masculinidad se siente ofendida, machotes.
Me piden que publique este vÃdeo lo primero:
Me centraré en el microsite que han preparado los de Audi porque, como es lógico, no me han dejado el carro para que lo analice, aunque serÃa buen momento porque el sábado saqué de un párking un coche con otros cinco tÃos dentro en una mediana ebriedad sin rozar columna alguna y maniobrando básicamente nada, pero por lo visto no están tan locos como mi amigo. Ellos se pierden mi proeza.
Asà que me ganaré el pan con el sudor de sus diseñadores web. El site está enteeramente hecho en flash, carga la tÃpica cortinilla de entrada con el mensaje de cargando que todos habremos visto alguna vez en estas presentaciones. No he probado a entrar sin flash para ver qué pasa, pero me imagino que no lo permitirá, y con lo mal que está el tema Flash+Linux 64bits, cualquiera se arriesga.
El site te introduce en un hangar a modo donde el héroe tiene sus coches y trajes, la batcueva de Ironman, vamos.
Ahà se despliega un menú circular (que me recuerda a lo montado en The Last City) que te permite navegar por los contenidos de la web: juegos, vÃdeos, detrás del R8 y más contenido que intenta que permanezcas lo máximo posible en su página, algo que sin duda conseguirán con los chavales más pequeños, aunque no conozcan al personaje.
Sà merece la pena visitar el apartado «Un historial de innovaciones», donde muestran imágenes de viejas glorias de la marca de los aros y portadas del cómic americano desde hace varias décadas, mostrando cambios y avances.
Y aunque sea un promo-site del R8, lo utilizan para venderte también el resto de coches de la gama, y eso no me gusta, porque no me gustan los otros coches, quiero decir.
Lo que me ha llamado la atención es que este personaje de cómic esté acompañado por un vehÃculo europeo, a saber cuánto dinero ha pagado Audi por salir en el film, seguro que más que a mÃ.
Visto en: Zync.