Avisad a Scotland Yard, que no escribo de farol, que han pasado varios temas por mi mente mientras este se quedaba en borrador. Desde los lacitos de la ropa Ãntima femenina, que no iba darme para más de dos palabras sino cinco al poner «A mà sû delante del «Me encandilan». Esa gente feliz e incapaz, dentro de su inexistente intento, de soltarse del brazo de su vicio favorito. Que parece que no, pero sÃ, sigue habiendo un humano detrás del teclado, de la caja de texto, del RSS, de los LEDs de la pantalla. Pero no, no esta vez, las ideas han tomado otros caminos, asà pues, fin del encanto, que ahora vienen las palabrotas.
Tanto en los partidos de fútbol de Liga de Campeones, tanto en las retransmisiones de otros eventos deportivos en su canal especÃfico como la Liga ACB, tanto en otras tantas cosas, nos tragamos en los descansos, en los tiempos muertos, en esos putos precisos instantes que saltan al campo las animadoras… Unos anuncios de cerveza, de agua mineral, de coches de patrocinadores oficiales de la UEFA, de la Liga, de las medias, brazaletes y corpiños. Y es normal, era asÃ, sólo que hace ya año y medio que TVE dejó de emitir publicidad, no más birras, no más agua, ni refrescos ni bugas, ni ese magnÃfico corto de Calzedonia con Billy Joel. Ya sabéis, una televisión pública sufragada sin los ingresos que genera la publicidad. Ahora, la pregunta viene de corrido, ¿pagan esas empresas por aparecer en esos espacios televisados, quién se lleva el dinero si es asÃ?
Afortunadamente hay respuestas a estas preguntas y me parecen una sandez. Si al comprar por auténticas millonadas un paquete de partidos como Champions League, algunos de la Selección Española cuyo caso lo entenderÃa si comprasen todos o la mencionada ACB estás obligado a emitirlos incluyendo esos spots, por los que, repito, has pagado, sólo con la excusa de que son esos anunciantes los que mantienen parte de esa competición (algo que comprendo) me parecerÃa más lógico y loable retirarse inmediatamente de esa puja y dejar que sean otras cadenas quienes se encarguen de emitir esos partidos renunciando a la lucha por las audiencias, que es el único premio que se lleva TVE porque no cuela que esto sea una táctica para reforzar el deporte patrio (ni en el campeonato nacional ACB), que no es baloncesto en silla de ruedas.
En definitiva, que me he disgustado con la tonterÃa, querÃa dejarlo por escrito y, si lo llego a saber, me quedo hablando de sujetadores con un delicado lazo en el medio.
Visto en: TVE y TDP.
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