Lo que vengo a contar no sólo parece una estupidez. Es una estupidez. Pero buenrollista, y eso mola. Seguro que, como yo, vosotros os fijáis en las matrÃculas de los vehÃculos, algunos queriendo y otros sin querer. Hay que reconocer que las placas españolas (las europeas en general) son bastante sosas y los juegos que hay con ellas se resumen en buscar números capicúas y dar un golpecito en el brazo al compañero de viaje (si se va a pata, pues nada).
A mà me pasa que, desde que cambiaron todo el modelo de matrÃculas al actual comenzando con un E de España azul a la izquierda, cuatro números y tres consonantes (excepto la Ñ) en favor del modelo anterior que mostraba la provincia de origen del coche, me dedico a intentar encontrar sentido a esas tres letras del final. SÃ, es una tonterÃa. Pero vas por la calle y te encuentras una furgoneta mal aparcada con matrÃcula 1234 BTD y te rÃes, «Vete de ahû. Es un leve jiji-jaja que dura cuatro pasos, no te alegra el dÃa pero transmite buenas emociones. Lo guay es encadenar unas pocas, BTD, BCD, FTP, FTW, CCC o FHM por poner unos simples ejemplos. Hay muchas relacionadas con la amplia familia de la informática. Por eso estoy ansioso por ver una WTF, cual Alvy en celo. Me divierten aunque no sé por qué después de «entender» unas pocas del tirón empiezo a pensar que imagino cosas, mensaje ocultos en las matrÃculas, conspiración desde la DGT (otra más).
He de confesar que desde que se realizó la modernización y normalización de estas matrÃculas siempre me he preguntado dos cosas, si puedes personalizarte la placa (creo que antes sà bajo una elevada suma de no tan antiguas pesetas) y si realmente sacarán la 6969 XXX. Me encantarÃa verla en un R5. Fucker total.
Visto en: Carretera.
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